Entonces vamos asi por la vida
encontrando, perdiendo, recuperando y destruyendo todo, todo a nuestro paso,
asi vamos por la vida, cambiando, descubriendo, aprendiendo cada día y
enseñando a vivir.
Y pasan los momentos, las horas, los días,
las semanas, y estas se convierten en meses, en años de nuestra vida que van
quedando en el infinito cofre de nuestros recuerdos. Ese que lleva en un
rinconcito todas nuestras decepciones, que está lleno de ilusiones, de amor, de
alegría, y… ¿Por qué no? Una que otra lagrima que jamás pudimos secar, ni siquiera
con un abrazo. Todo se encuentra en ese cofrecito que solo podemos abrir
nosotros.
Pero. No mires para atrás. No, no mires
hacia atrás, ya vas a tener tiempo para eso en el futuro. Mira el hoy, mira el
presente, y tu reflejo, guarda tu rencor, mírate sin miedo, sin odio, apréciate.
Sos único.
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