-Escribir
es traspasar cualquier muralla y confrontar al caos que provoca el colapso de
nuestra mente sumida en millones de pensamientos.-
Ya deje de demandarle a mi conciencia que regrese a mi cabeza…
Quiero a mis viejos pensamientos. A veces extraño mis sanos y aburridos
pensamientos. Pero inmediatamente repaso cual fue la causa y consecuencia.
Lo que conformo a mi laberinto interno.
Muchas veces se que me encuentro despierta, pero aun así no soy yo la
que se encuentra viviendo en el tiempo y espacio. ¿Dónde tropiezo y caigo
cuando mi mente es abatida por mis impulsos?
Caigo tan rápido que no percibo ningún malestar, ni sonido al caer. Soy
un rompecabezas disperso, perdido en instantes. Y por un momento vuelvo a ser
yo. Olvido haber pesado nada más que los veinte gramos que pesa mi alma.
Soy un fragmento nublado por pensamientos. Que alguien me reconstruya -Tú- cuando despierte. Espero que mi
mirada se recomponga al rosar tus alas de sueños caídos una vez más. Y que mis
laberintos no vuelvan a alterar mi percepción nunca.
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